Geraldine Molina 
Los entrenadores de Cobreloa no han recibido sus sueldos y las jugadoras acusan que la dirigencia las dejó tiradas después de terminar el Ascenso 2022.
La temporada 2022 fue la primera en que Cobreloa compitió en el Ascenso Femenino. Luego de un largo receso, ya que compitieron en Primera División en 2010 y 2011, el elenco esta vez se radicó en Calama y volvió a la competencia después del primer anuncio oficial en 2019.
Sin embargo, el rendimiento no fue el idóneo. Las calameñas terminaron en el tercer lugar de la zona norte, que estaba compuesta por cuatro equipos, con apenas cinco puntos. Una victoria, dos empates y tres derrotas marcaron su paso por la división de plata, además de una serie de polémicas extrafutbolísticas.
Esta semana, El Mercurio de Calama publicó una grave denuncia contra los directivos de Cobreloa. En ella aseguran que el equipo fue abandonado después de terminar el torneo de Ascenso y que la dirigencia se desentendió de su rama femenina hasta el día de hoy. Esto, a pesar de que en redes sociales han publicado imágenes de entrenamientos durante diciembre.
“Dicen que entrenamos con petos nuevos y es mentira. Usamos los que dejó la juvenil porque a ellos les renovaron la ropa este año. Dicen que vamos a competir luciendo uniforme del club, pero el buzo prácticamente lo costeó cada jugadora. Nosotras venimos porque este es nuestro sueño, somos constantes, entrenamos y jugamos por amor a la camiseta, pero obvio que te desilusiona que te digan que si estás disconforme puedes buscarte un equipo donde te traten mejor”, explica una jugadora loína en el reportaje.
Por si eso fuera poco, distintos miembros del cuerpo técnico de Cobreloa no han recibido sus sueldos ni tampoco tienen claridad sobre su futuro. A punto de terminar 2022, aún no saben si continuarán dirigiendo (o no) al equipo en la temporada 2023. La institución no se ha referido oficialmente al respecto.
Foto: Cobreloa
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