Geraldine Molina 
Caniguán es una de las 26 jugadoras que trabajó con la Selección Chilena en el microciclo de abril y se mostró muy contenta y agradecida por la citación.
Este lunes terminó la segunda ventana de selecciones del año. Pese a que La Roja pudo disputar amistosos internacionales, el equipo estuvo compuesto por una nómina de jugadoras locales, jugaron amistosos ante Palestino y entre ellas mismas, y ya piensa en Santiago 2023.
Franchesca Caniguán confesó sentirse muy feliz por la convocatoria a la presente fecha FIFA. “Estoy muy contenta por la nominación. Siempre es lindo estar acá y poder defender los colores de la selección. Ha sido algo muy gratificante y lindo, también por todas las niñas que están acá”, destacó.
Respecto al llamado a tanta juvenil, Chesca afirmó que “hace mucho tiempo no se veían tantas niñas jóvenes acá en la selección, pero creo que es un camino que se tiene que ir formando de nuevo; desde las niñas más pequeñas se tiene que formar algo a largo plazo, para lograr muchas cosas”.
El principal desafío de Franchesca Caniguán ha sido acostumbrarse a jugar en un club profesional. Luego de dejar Fernández Vial por Universidad de Chile, lo que le valió volver a la Selección Chilena, la delantera confesó que no ha sido un trabajo fácil.
“Es un cambio súper grande, si bien en las regiones se está profesionalizando de a poco el fútbol femenino, el cambio es muy drástico. Acá, en los clubes de Santiago, se trabaja a nivel de selección y en general mucho más profesional de lo que se trabaja en las regiones”, sentenció. Este fin de semana, Caniguán y Universidad de Chile enfrentarán a Palestino por la fecha 3 del Campeonato Femenino 2023.
Foto: La Roja
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