¿De quién es la culpa?

El planteamiento que ha mostrado La Roja en Tokio 2020 le ha significado una lluvia de críticas a José Letelier. Pero, ¿es realmente él el único culpable?

La Roja hizo su estreno en los primeros Juegos Olímpicos de su historia y, luego del partido contra Canadá, le llovieron críticas a José Letelier; tanto por el planteamiento del partido, por la ausencia de algunas jugadoras, y por hacer cambios sobre los minutos finales. Pero, ¿estamos siendo justos?

El partido contra Gran Bretaña fue totalmente distinto al que se le planteó a Canadá; fue una sorpresa salir del 4-3-3 al que estamos tan acostumbrados y pasar a un esquema con sólo tres en defensa (que finalmente se transformaba en 5). Además, se vieron a varias jugadoras en posiciones no habituales, que no sé por qué sorprenden aún, si ha pasado tantas veces.

1 a 1 de Chile vs Canadá en los JJOO de Tokio 2020

Es más, creo que yo también dudé de la efectividad del XI titular, pero con el paso de los minutos Letelier había acertado al dotar el mediocampo; puso dos laterales volantes con Francisca Lara y Rosario Balmaceda, además de Karen Araya en labores de contención y Paloma López como volante mixta. Tuvimos un mediocampo más poblado que nunca, que sumando y restando, funcionó. Pasamos de un partido defensivo, a uno en que efectivamente competimos.

Leí a muchas personas enojadas porque Balmaceda entró a jugar en el mediocampo, que si bien no es su posición ni especialidad, conocemos su capacidad física. Rosario no se queda esperando sino que le da continuidad a la jugada; tiene profundidad y, a la vez, tiene la vuelta para defender. El rol que le pidieron lo cumplió.

Y así, un tremendo análisis en diversas redes sociales de por qué no era correcto una jugadora en un lugar u otro. O de cómo no soltar a Karen Araya, o cómo mantener un enganche que no estaba funcionando. Y hasta el minuto 70 el partido le dio la razón a José Letelier; su planteamiento fue correcto y acertado, e incluso las transiciones fueron más rápidas que el partido anterior.

Araya scores from the spot pic.twitter.com/0Pudkznibr

— Hedonist (@The_Hedonist_6) July 24, 2021

En el último cuarto se nos vino el tiempo encima: ese era el momento de hacer una lectura del juego que no se plasmó con los cambios. Muchos estimamos que fueron tardíos y no influyeron en el juego. Se cambiaron jugadoras posición por posición sobre el final, pero no un ajuste realmente visible en el esquema. Aunque el palo le evitó a María Jose Urrutia convertirse en goleadora olímpica, tuvimos el empate ahí.

Pienso en el año 2017, si me hubiesen dicho que íbamos a perder 2-0 con Gran Bretaña o 2-1 con Canadá no lo hubiese creído. Yo hubiese firmado el resultado, porque hubiese pensado antes en un 5-0; como ya sabemos, hay al menos 20-30 años de diferencia en el desarrollo del fútbol jugado por mujeres en Chile en comparación a Canadá o Gran Bretaña. Esto no es llanto, sino un cable a tierra para todos quienes critican al DT por ser excesivamente defensivo.

El fin de semana pasado, recuerdo que una persona muy ajena al fútbol femenino, pero muy futbolera, me preguntó cómo eran las rivales. Para que pudiera comprender, le dije que era como si Chile en 1995 hubiese jugado contra Alemania. Su cara fue de sorpresa, porque se enteró del nivel al que están jugando las seleccionadas chilenas.

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Nos urge poner contexto a lo realmente importante que es haber clasificado a un Mundial y a unos Juegos Olímpicos, tomarle el peso deportivo y social. Ver, incluso, que de un partido a otro mostramos mucho más. Y por supuesto que tenemos más que dar y mostrar. Todo eso tiene el nombre de José Letelier por todos lados, porque con él al mando se han conseguido todos esos logros.

Podremos debatir si el proceso del DT con la Roja debe llegar a su fin tras los Juegos Olímpicos. Para muchos sí, pero para mí esto podría darse únicamente si llegase un nombre adecuado con un proyecto formativo que, de manera integral, le pida compromiso a la ANFP y a los clubes. ¿Se imaginan si Yenny Acuña llevara más de 1 año dedicada al fútbol profesional? Porque hoy no alcanza a superar el año, y miren dónde está. Talento tenemos, pero está en bruto en las divisiones menores, que están paradas desde hace casi dos años.

No importa el nombre del DT, para avanzar se necesita formar a niñas desde los 8 años y no a las 15 como ha pasado en tantas ocasiones. Si buscamos culpables, tenemos un torneo que aún no es profesional y una Federación que recién empieza a velar por el fútbol practicado por mujeres.

Foto: Comunicaciones ANFP